Nos vendrá muy bien una ducha con geles suaves o bien darnos un baño con aceites esenciales.
Para conservar durante más tiempo el bronceado podemos hacer un baño con té negro: Hacemos una infusión de medio litro de té negro y lo añadimos al agua de la bañera, nos daremos un baño de unos diez minutos. También tiene efecto nutritivo.
Después del baño es recomendable usar cremas para después del Sol, que nos refrescarán, hidrataran ya harán que dure más el bronceado.
El Aloe Vera es muy recomendable por su efecto regenerador.
Si después de la exposición al Sol tienes la piel roja tienes algunos remedios caseros para las quemaduras leves del Sol. Si estas son graves, lo mejor es acudir a un médico.
- Remedios caseros con Aloe Vera: Mete en la nevera las hojas de Aloe Vera, tras una hora, extrae el Aloe y aplica en la zona afectada, aliviará el dolor.
- Té de Manzanilla: (sobre todo para la cara), sobrecitos de manzanilla humedecidos en agua, aplicarlos directamente sobre la zona afectada. Reducirás la inflamación y la irritación.
- Pepinos:Aplicar rodajas de pepino sobre la zona de piel afectada, calmará el ardor y restaura la piel.
- Leche fría: Con un gasa empapada en leche fría, aplicar sobre la zona a tratar, dará frescor a la piel.
- Avena: Hacemos una pasta con avena y agua, aplicamos dicha pasta sobre la zona a tratar, esto reducirá el dolor.
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